Muchas pequeñas empresas dudan si invertir en un logotipo profesional. Un error muy común que puede dinamitar la imagen y el crecimiento de la empresa.
Porqué debo invertir en un logotipo profesional
Pese a que para muchos invertir en un logotipo es un gasto, no es así.
Un logotipo bien diseñado es una inversión.
Y, aunque muchas PYMES y emprendedores no lo saben, la inversion en el diseño de un buen logotipo es una de las inversiones de mas fácil amortización. El ROI (retorno de la inversión) de un logotipo se amortiza en unos pocas semanas o, como mucho, en unos pocos meses.
Cómo lo calculamos la inversión en un logotipo
Para los amantes de las matemáticas y de la contabilidad, os dejamos la fórmula para calcular el retorno de la inversión de cualquier cosa:
ROI = (beneficio obtenido – inversión) / inversión
Pongamos un ejemplo:
Supongamos que invertimos 600€ en el diseño de un logotipo realizado por un profesional. A partir de ese momento aumentamos la facturación en 300€/mes.
En un año, habremos facturado 3600€ de más. En este caso, si aplicamos la fórmula nos dará un porcentaje de retorno.
Siguiendo el mismo ejemplo, hemos recuperado la inversión que hicimos en el logotipo en apenas 2 meses y pocos días.
Eso implica que a partir del 3º mes, ya hemos cubierto los 600€ que nos costó el logotipo y todo lo que nos traiga será beneficio neto. Y, como además la vida útil de un buen logotipo es muy larga, podremos obtener beneficios netos de ese logotipo durante años.
¿Qué otra inversión de una empresa se amortiza tanto y tan rápido? Probablemente una web, pero ese ya es tema de otro post.
Sin embargo, y siendo realistas, es probable que el logotipo no sea el único responsable al 100% del aumento en los beneficios. La calidad de la atencion al cliente, de los productos, servicios, el entorno, los cambios micro y macro-económicos, etc también son influyentes.
Pero es muy probable que la inversión en el diseño de un logotipo profesional repercuta en el corto plazo en más de un 50% del aumento en las ventas.
Muchos estudios certifican que la imagen de un producto influye en el 78% de las compras que cualquier consumidor compra en el supermercado.
Según KissMetrics, ante la compra de un producto nuevo, el 93% de los encuestados basarán su compra únicamente en la apariencia visual del producto.
Esto nos muestra la importancia que tiene la imagen, en su estado más genérico, en la decisión de compra.
Y no debemos olvidar que el logotipo será, la base, el eje vertebral y a la vez el punto de partida del que surgirán el resto de elementos de imagen de la empresa: tarjetas, web, envases, carteles, publicidad… Por lo que si el logotipo que tenemos no es bueno ni profesional, el resto de la imagen corporativa tampoco lo será.
Hay que tener en cuenta que, pese a que en general utilizamos el logotipo con infinidad de objetivos secundarios, el objetivo final de un logotipo es que nos consiga atraer clientes potenciales que compren nuestros productos o servicios para satisfacer sus necesidades.
Por eso, del mismo modo que cuando vamos a una entrevista para conseguir un trabajo intentamos proyectar nuestra mejor imagen, cuando vamos a presentarnos ante nuestros posibles clientes debemos proyectar nuestra mejor imagen. ¿O acaso saldrías a buscar trabajo sin duchar, sin peinar y con la ropa sucia? Seguro que no.
Beneficios de tener un logotipo profesional
No hay que olvidar que:
- Sólo hay una oportunidad de crear una primera impresión.
Y nuestro público potencial solo se tomará 2 segundos en prejuzgar a nuestra empresa en función a la primera impresión que se ha llevado de nuestro logotipo. Dependerá de si el diseño del logotipo sea bueno o malo para que creemos una primera impresión de nuestra empresa que atraiga a los clientes potenciales o que los espante. - El logotipo representa la esencia de la empresa.
Si un logotipo es feo, inadecuado,mal elaborado,… Transmite la misma sensación de la empresa que representa y generará desconfianza ante sus posibles clientes.
- El logotipo nos diferencia de la competencia (o nos debería diferenciar)
Si nuestro logotipo es más adecuado, está mejor diseñado, es más limpio, más visible y es capaz de transmitir nuestro valor añadido, nos demarcará notablemente de nuestra competencia. En el caso de tener un logotipo mal diseñado, sin sentido,… le estamos haciendo un gran favor a la competencia ya que seguro que le vamos a regalar clientes.
- El logotipo de nuestra empresa debe ayudarnos a llamar la atención, atraer, captar y a ser posible enamorar a nuestro cliente potencial.
Por eso, es muy importante que esté hecho de manera profesional, y que haya habido un estudio previo de qué somos, qué representamos y a quién queremos llegar.
- El logotipo nos ayudará a segmentar a nuestros clientes potenciales.
Cada empresa tiene un tipo de cliente en función a la proximidad física y emocional del cliente con la marca, de la afinidad, del gusto, de las necesidades de cada cliente… Y un buen logotipo nos ayudará a contactar con el público que potencialmente puede estar interesado. Si el logotipo no está pensado para un público en concreto o simplemente está hecho al «tun tun» malgastaremos esfuerzos llamando la atención de público que en realidad no está interesado en nuestro negocio, ni en nuestros productos o servicios. De este modo es probable que consigamos clientes insatisfechos (porque no era lo que esperaban) y terminará afectando no solo a nuestra imagen sino también a las ventas de la empresa.
- El logotipo debe hacer inconfundible a la marca, asociarla a determinados valores y posicionarla en la mente del consumidor.
Si nuestro logotipo no está pensado por un profesional que entienda de diseño, de formas, de simbología de colores, de interpretaciones y de posicionamiento en la mente del consumidor, es muy probable que invirtamos en un logotipo asocie nuestra marca a valores erróneos y afecte a nuestro posicionamiento en la mente del consumidor . Es decir, que cuando un cliente potencial vea nuestro logotipo piense en conceptos contrarios a lo que somos o a lo que queremos trasmitir y en función a estos nos rechace o nos encasille.
Por todos estos factores, la inversión en un logotipo profesional es una de las mejores inversiones que puede hacer cualquier empresa por pequeña que sea ya que la relación coste-beneficio es muy buena.
Obviamente, nosotros siempre recomendamos dejar una tarea tan delicada en manos de expertos profesionales ya que para diseñar logotipos de manera profesional es necesario tener un conocimiento previo de imagen corporativa, de diseño, de simbolismo de formas y colores, de dibujo, de conocimiento de las tipologías de clientes, de uso de programas vectoriales de diseño, etc.
Pero para aquellos más atrevidos o habilidosos que queráis diseñar vosotros mismos vuestro logotipo os dejaremos 2 recomendaciones:
- Tener en cuenta estás 6 claves para diseñar un buen logotipo
- Tener en cuenta la relación coste/oportunidad: Ya que el tiempo que estás haciendo el logotipo es tiempo que dejas de hacer otras cosas que si te reportan beneficios. Además, hay que tener en cuenta que probablemente tardarás el triple de lo que tardaría un profesional y la calidad del logotipo que tu puedas crear, sin ánimo de desmerecer, seguramente será muy inferior a la de un profesional y no te ayudará a conseguir los objetivos que todo logotipo debería cumplir.
¿Aún sigues pensado que invertir en el diseño de un logotipo es un gasto?
Si necesitas ayuda con tu estrategia y diseño, no dudes en escribirnos. Nuestro equipo estará encantado de ayudarte y asesorarte de forma personalizada.